Con un ventanal magnífico que se abre a la piscina principal del cortijo, la Suite Mirador hace honor a su nombre. La luz natural lo inunda todo y cada rincón invita a detenerse y mirar. Cuenta con dos camas amplias, una terraza privada perfecta para leer, desayunar o simplemente respirar, y un baño espacioso donde destaca una bañera majestuosa que convierte el momento del baño en una experiencia sensorial. El gran armario empotrado, la cafetera y el mini frigorífico completan una estancia pensada para desconectar sin renunciar a nada.
Con vistas abiertas a la piscina y el cielo de Vera como telón de fondo, esta suite combina espacio, confort y una atmósfera serena donde cada detalle invita a quedarse un poco más.
Ya has visto cómo es. Ahora te invitamos a vivirlo.